viernes, 25 de abril de 2014

Cicatrices y moratones

Nunca he visto un vicio tan perfecto como tú.
Pasamos las noches en vela juntando los dedos.
Conexiones imperfectas tocando mi hipocampo.
Mapas incompletos sin tu presencia.
Nos besamos el alma bajo las mantas blancas.
Hablando al ventilador.
Viste mi alma llena de cicatrices y moratones.
Quería preguntarte qué ves cuando me miras.
Pero la valentía me falló aquella noche.
Ya estoy aquí.
No llores más.
Ya han pasado los días raros y la nieve no cae.
Mi espalda ya no tiene que soportar todo el peso gracias a tus abrazos.
Pero vienen más días raros.
Creo que no puedo dejarte ir.
La llave que llevo al cuello no abre más corazones.
Cuando tocas el mío la alarma se enciende.
Tal vez en aquellas inundaciones sea mejor nadar.
Mejor que las paredes ardan y que no se caigan sobre nosotros.
Lo que me hace seguir adelante en este camino lleno de polvo eres tú.
Sin bombas ni gravedad.
Dime qué ves.
¿Existe algo dentro de mi?
Dime qué ves.

jueves, 24 de abril de 2014

Preguntas sin respuesta

Si tú me querías ¿Por qué te fuiste?
Ya son demasiadas noches.
Si tú me querías ¿Por qué dejaste mi cuerpo sin corazón?
Ya son demasiados meses.
Si tú me querías ¿Por qué rompiste mi corazón?
Con el corazón en la mano.
¿Por qué si yo te quiero no sirve de nada?
Morado.
¿Por qué no quiero a nadie más?
Con respiración asistida.
¿Por qué me alejé de ti?
No encontraré a nadie más.
¿Por qué no supiste leer entre líneas?
¿Por qué tienes tantos defectos?
¿Por qué eres tan simple?
¿Por qué no escogí mi segundo plan?
En el laboratorio me han dicho que no pueden borrar los recuerdos.
Que lo que empieza no acaba.
Y que en donde hubo fuego hay cenizas.
Pero la ceniza no dibuja un camino hacía tu pecho.
Y estoy.
Y estoy demasiado triste para avanzar.
Aún no he muerto y quiero ver la luz.
Deshacerme de todas tus mentiras y entrar en mi armario.
Entre pieles y tejidos que desconozco desapareceré.
Sí, lo haré.
En el agujero de mi corazón.
En el agujero que me lleve a mi país soñado.

miércoles, 23 de abril de 2014

Nada que decir

No me quedan fuerzas ni sangre para seguir escribiéndote maldito miserable.
Ni el relámpago más fuerte te advirtió de mi caída.
Me escapo entre las nubes de aquella tormenta.
Me has perdido.
Te lo escribí en miles de estelas centrifugadas.
Ya sé que tú me has olvidado.
Pero yo no puedo disimular la tristeza que siento.
El futuro no existe en tus brazos ni en mis costillas.
Necesito inspiración que se ha ido con aquel tren que me llevó hasta tu pelo.
Estoy cansando de recordar el pasado y fingir que no tengo miedo del futuro.
Me arrancaste literalmente el corazón del pecho y lo pisaste.
Me dejaste una armadura que ya no te protege nada más que mi tristeza.
La piel se cae a trozos y se pierde con mi cerebro.
¿No crees que eres muy cruel?
Solo tengo alas en mis sueños y tú solo eres una distracción dolorosa arañándome el alma.
No te preocupes por mí, cobarde.
Solo fui un necio entregándole todo lo que sabía dar a alguien que no lo merecía.
Hubiese escondido un último pedazo dentro de mí.

lunes, 21 de abril de 2014

Vida anterior

Vida anterior.
Tengo que asumir de una vez por todas que nunca fui tu canción favorita.
Mis manos pasaban por tu pelo sucio.
Podía ver el frío en tus ojos y la capa de escarcha que te rodeaba.
Quiero volver a desinfectarme de tu dolor.
Espantar a la luz tenebrosa sin temblar cada segundo.
Y tal vez tú seas el príncipe de mi castillo de cristal.
Esta tristeza me acompañaba allá donde vaya.
No como tú.
Nuestro amor es demasiado raro.
Siempre que me grita voy a su encuentro.
Quiero ser como antes.
Contagiando a todo el que me toca.
Que todos me miren mal.
Tal vez fue mi enfermedad.
Tal vez fue tu indiferencia.
No te limpies la cara.
Vulgar asesino de corazones sin coraza.
Quiero ser como antes y no me da miedo admitirlo.
Vete de mi corazón ya.

domingo, 20 de abril de 2014

Te acompañé y te fuiste

Yo nunca te quité la maleta.
Te acompañe día a día.
Sangre negra manchando nuestros dedos.
No, por favor déjame hablar.
Esta es la forma que tengo de sentir el miedo.
Todo lo que quiero es caminar sobre el mar.
Flotar entre árboles que has quemado y tocar sus cenizas.
Nos convertimos en polvo demasiad rápido.
Más rápido de lo que consume el oxigeno una vela.
Nunca te dije lo que necesitaba de ti.
Y ahora el otoño se ha acabado.
Sigo siendo el mismo.
Y tengo los mismos miedos.
Yo nunca te quité la maleta.
Te acompañe día a día.
Pero estuve solo mucho tiempo.
Todo este río de pensamientos y falsas esperanzas me arrastra.
Por favor nunca te vayas de mi cama.
Quiero verte cuando despierte.
Caigo y recaigo cuando me dejas solo.
No te burles de mi.
Mis sentimientos son serios.
Pero el invierno ha terminado.
Y no sé si volverá algún día.

sábado, 19 de abril de 2014

Verdad y reproche

¿Quieres estar con alguien como yo?
Busco la transparencia que tú no supiste ofrecerme.
Las mentiras, aunque con apariencia de cristal hacen daño al romperse.
He roto todas nuestras tazas de té.
Todo lo que quiere este palacio es liberarse.
Y yo quiero buscar los sueños que no tengo en otra parte.
Invoca las ganas que perdí al hacerte cada vez más feliz.
Nunca me verás más por una pantalla.
Tengo este sentimiento.
Se está haciendo difícil demostrarlo.
¿Me echas de menos cariño?
¿Tu corazón está en llamas?
¿Estás ya loco?
Porque yo estoy solo, cariño.

viernes, 18 de abril de 2014

Cansancio mastodóntico

Estelas de aviones y plumas de palomas asesinadas.
El ven que tú siempre llegas tarde.
Cansancio mastodóntico es lo que siento al esperarte.
Veo el amanecer en tus ojos.
No quiero que seas alguien diferente.
Pero tú siempre llegas tarde.
No te vayas y quédate a ver como las nubes lloran.
Espera un momento.
No estoy sobre las nubes esperando tu llamada.
Jamás disimules conmigo.
Ya son cuatrocientos treinta y dos días sin dormir.
Sin que nuestras manos se unan formando sombras chinas.
Siendo arrastrado por el viento más gélido y desolador.
Te esperé valiente. Sin apartar la vista de la pantalla.
Algún día quizá me digne a perdonarte.
No quiero llorar al verte feliz sin mí.
Sin conocer cada rincón de tu otoñal corazón.
Pero me resulta tan difícil transmitir lo que creo.
Tu refracción sentimental unida con la mía crearon precipicios.

jueves, 17 de abril de 2014

Venas coronarias

Todo estaba lleno de ti.
Tu conspiración solo acababa de empezar.
Podré ver las venas de mi corazón cuando termines de destrozarme.
Todo es muy bonito ahora.
Pero no todo es para siempre.
Sí, lo sabemos.
Parecías tan feliz aquel momento.
Mientras bajábamos al infierno.
Sí, lo sabemos.
Quedaste atrapado en aquel castillo de cristal
¿Verdad?
Recuerda que soy el rey empapado en lágrimas.
Hablemos sobre lo que nos gusta.
Uno de los dos tiene que irse.
Y créeme.
No quiero ser cruel.
En los viejos tiempos era suficiente.
Mereces estar solo.
Y todo brillará sin ti.
Estoy esperando ver mis venas del corazón.
Tú las mataste y aplastaste a todas.
Sí, me gustas pero no quiero hablar.
Sal de una maldita vez de mis sueños.
Es la última oportunidad.

miércoles, 16 de abril de 2014

Explosiones de plumas y agujeros negros

¿No crees que es aburrido cómo me tratas?
Estoy lleno de esto y está pegado a mí como materia oscura.
Quizás pueda ser feliz viendo tu muerte sentimental.
Tal vez ese sea mi plan principal.
No puedo ver más allá de la capa de destrozos que has provocado.
Quedé atrapado en aquel viaje en transbordador .
En el mundo de la suposición yo soy el rey y tú eres el causante.
Aunque esté empapado en odio y miedo sé que recaeré de nuevo.
Mi cabeza se llena demasiado rápido de situaciones en las que no quiero que estés.
Tal vez estés feliz de haberme perdido.
Yo desearía perder a alguien como yo.
¿No es verdad?
Nunca caigas de lado por la ventana.
En el mundo de la suposición yo soy el rey y tú eres el horror.
Explosiones de plumas engullidas por agujeros oscuros.
Y nuestros trajes blancos con nuestras escafandras de papel aluminio.
Desgarrados por nosotros mismos sin poder respirar.
¿Por qué te ríes?
No eres más fuerte que yo.
¿De qué te ríes?
Explosiones de plumas y agujeros negros entre nosotros.
Donde nada es bueno.

martes, 15 de abril de 2014

Bombas indiferentes

Las bombas que tiraste desde tu indiferencia han dado a mi corazón.
No te cubras de joyas ni pienses que ahora eres la mejor persona del mundo.
Tienes mucho dolor y daño que no cargas en tu espalda.
Vivo en las ruinas de mi castillo de cristal esperando a que vengas a rescatarme.
Quiero que te cortes con ellas y sangres tanto como está sangrando mi pecho.
Estoy buscando nuevas influencias.
Algo que haga que el sol dirija su benevolencia hacia los cristales y me libere.
El camino hubiese sido largo pero seguro que te hubiese gustado.
Di tus ultimas palabras porque tú y yo vamos a morir pronto.
Podía verlo aunque se me hubiesen clavado miles de cristales en los ojos.
En cambio tú no viste nada de lo que sucedió.
He visto tu pasión por ignorar cualquier emoción y sentimiento.
Cariño, hoy hemos nacido para morir.
Ya no podremos prenderle fuego a la lluvia.
Pero sí a mis lágrimas.
Es la temporada de raparse la cabeza y sacarte de ella.
Tal vez te reíste de mí y mis sentimientos.
Y todas estas cicatrices ahora están en mi corazón.
Viajaremos en cohete hasta la luna y te abandonaré allí.
No creo que sientas lo mismo que yo.
Tú no tienes sentimientos.
No miraré hacia atrás cuando me vaya.
Siente como comienza.
Siente como me voy sin pensar antes en tus sentimientos.
No, no me voy a quedar contigo.

lunes, 14 de abril de 2014

Y lo sabes

Seguro que hoy te has vuelto a ir.
Mi piel tiene arañazos y cicatrices que nunca desaparecerán.
Cuatro meses o más luchando el aire con mi corazón.
Quiero dejarlo ir.
Que se lo lleve sin mirar atrás y me libere.
Vivir en ciudades que nunca salen por televisión.
Pero yo ya no estoy a tu lado.
Sufriendo cada ida semanal.
Ya no te espero en mi castillo de cristal.
Ya no enciendo las luces.
Me cuesta creer que todavía no te consideres el antagonista de esta historia.
Tal vez porque ya la has olvidado.
O tal vez porque aquí el que se siente miserable soy yo.
Pero no fue mi culpa y tú me dejaste ir.
Actos, actitudes y oportunidades.
No formamos parte del mismo equipo.
Y lo sabes.
Y lo sabes.
Tiraste mi confianza por el ojo de buey.
Y lo sabes.
Y lo sabes.
No puedo sacarte de mi cabeza.
Y lo sé.
Y lo sé.
Has perdido quizás a alguien que haría cualquier cosa para acompañarte.
Y lo sabes.
Y lo sabes.

domingo, 13 de abril de 2014

Ciudades de cristal

Otro día ante el gran abismo de una habitación llena de ruido y luces.
Mis sueños están hechos de anfetaminas y cianuro.
Las ciudades de cristal con sus muros llenos de gente entre mentiras.
Puede que no sea demasiado guapo pero sé sentirme miserable.
No fue mi culpa.
Demasiadas oportunidades silenciosas malgastadas.
Quiero un castillo de libertad y verte en mis sueños.
Ahora mi corazón está en ruinas.
Claro que lo sabes.
No quiero que seas el payaso de la clase.
A la gente como yo no nos importa.
Veré mis venas por dentro y me sentiré feliz.
Espero que te tropieces y te caigas de cabeza.
Hay miles de formas de demostrar que la gente no nos importa.
Y tú, cariño, te las sabes todas.
Creo que me voy a alejar de ti con todo mi corazón.
Sin esperar a que esto se apague.
Hiriendo al sol que te ha quemado el pelo.
Morderse las uñas es demasiado malo.
Muérdeme los labios.
Tápame los oídos.
Da igual lo que la gente diga cuando dices que son inferiores a ti.
Todo el mundo está solo y no se da cuenta.
Algún día la sangre dejará de correr por nuestras venas.
Y mi corazón dejará de sufrir al ver que el tuyo no lo hace.

sábado, 12 de abril de 2014

Ignorado

Me fui de tu cabeza.
Ahora solo sé desaparecer.
Tu olor a tabaco y tu misantropía de nacimiento.
Gritaste hasta romperte las cuerdas vocales pero nadie te escuchó.
Los abusones del patio del colegio y los profesionales en dejarte solo.
Te metiste en medio de cables de alta tensión.
No apareceré y nunca te salvaré.
Solo sé desaparecer.
El ardor de garganta, el sonido vacío de mi respiración.
Estoy deshaciéndome delante de ti.
No sabías si querías morir electrocutado por los cables o por tus pesadillas.
Siempre acababas en el suelo amor mío.
Ya no sigo tus huellas cuando te vas.
Temía las situaciones que pasaba contigo.
Mientras tú desaparecías entre los bosques más oscuros.
Perdóname si alguna vez te he tratado como la basura que eres.
Simplemente me rompiste el corazón, los sueños y la confianza.

viernes, 11 de abril de 2014

Castillo de arena

Las olas se aburren buscándote.
Pasan las noches encontrándote en los bajíos de mis recuerdos.
A veces te siento cuando caigo al mar y el peso de mi tristeza me hunde.
Pero el día siguiente vuelvo a aparecer en la playa con la cara llena de arena.
Sigo buscándote entre tantas huellas debajo del mar.
Despierto esperándote.
Buscando un cambio entre tanta sal y algas muertas flotantes.
Las olas no me dejan acercarme a ti.
Y nuestro castillo de arena se está deshaciendo.
Todos los días son grises y mojan las rocas erosionadas
Y la semana que viene ya no quedaran nubes para cubrir mi tristeza.
Me cuentan que se acabó y que desapareceré entre tantos peces y oscuridad.
Sigo buscando tu cuerpo en el fondo del mar.
Te has llevado el viento pero has dejado la distancia.
Y algunas oscuridades me asustan.
Como las de tu cabeza y corazón.
Solo te vi la piel aquel día que nos vimos en el arrecife.
Paso la noche buscándote en el fondo del mar.
Sé que aparecerás sin vida.
Y te enterraré en mi castillo de arena que hice sobre mi cabeza.

jueves, 10 de abril de 2014

Pantalla

Tal vez no lo quiera asumir.
Nunca dolerá tanto como ahora.
Que me empuje el viento hasta tus brazos.
Porque simplemente no puedo aguantar más tu ausencia.
Has ido perdiendo con los días.
Todavía queda un poco para ti.
Me quedaré con tus recuerdos que nunca fallan.
Y siempre se quedan conmigo hasta que no pueda más.
La guerra solo acababa de empezar pero yo ya había muerto en el frente.
Tuve que haberme quedado encerrado en tu desierta cabeza.
Sin habitaciones pero con miles de muros de piedra y magma ardiendo.
Sin disimular que te quiero y que me importas incluso más de lo que me importo yo.
Pero salí perdiendo.
Cada vez que respiro más tiempo me lleva reponerme de tus estocadas.
Debería de ser capaz pero no puedo hacer cosas imposibles.
Como olvidar o dejarte de lado.
Pero tú si lo hiciste.

miércoles, 9 de abril de 2014

Y un día será otro día

Ojalá las ganas me sirvieran de algo más.
Hoy no he probado bocado.
Las dulces sábanas me oprimen con sus colores grisáceos.
Arropándome e inmovilizándome como una camisa de fuerza.
Mañana será otro día malgastado pensando en ti en mi querida cama.
Mejor cerrar los ojos y dejar que todo pase.
Soñar contigo y que al día siguiente no me acuerde de nada.
Y un día será otro día.
Sin carnicerías y sin ilusiones destrozadas.
Mis venas tienen un color muy vistoso.
Me imagino cómo serán por dentro.
Ojalá las ganas me sirvieran de algo más.
Pero tengo miedo y me lleva el viento.
Apenas me late el corazón.
Espera.
¿Yo tengo corazón?
¿Me queda corazón?
Se supone que te lo ofrecí y tú lo tiraste por la ventana.
Como un despojo.
Como un dolor crónico y emotivo.
Mañana será otro día.
Sin ti y en mi cama de colores grises.

martes, 8 de abril de 2014

De primero tenemos corazón

Te esperé en el embarcadero cada noche de invierno.
Los copos de nieve se deshacían entre mis lágrimas y la sal.
El olor a pescado podrido se mezclaba con el de mi corazón marchito.
Nuestro navío naufragado partido en tres trozos de madera inservible.
Quemamos los remos y nademos hasta la Antártida.
Caminemos bajo un sol impregnado en liquido inflamable para nuestros sentimientos.
Tal vez podríamos habernos salvado si no fuese por tu constantes idas y venidas.
No tenía ningún plan y no quería huir, olvidar, ignorar.
No, no soy tú.
Sin piedras dignas de llamar hogar ni hielo digno de llamar corazón.
La existencia siempre ha sido un cristal vacío en medio de una noche sin fin.
No escribí a mis vicios descubiertos por nuestras diferencias.
Ni una carta impregnada en planes que nunca se ejecutarán.
Te grité que me siguieras cuando nos perdimos entre aquella tormenta de arena y nieve.
Los aludes me enterraron entre miles de gargantas que te habían dicho lo mismo.
Supongo que tras los truenos llega la lluvia.
Contaba el tiempo entre tu reacción y tu acción.
Por desgracia no conseguí nada.
Todos los intentos tirados por tierra,mar y aire.
Y solo conseguí hacer una carnicería de mí mismo.
Mi corazón partido en trozos puestos en una bandeja de plata esperando a que lo degustes.

lunes, 7 de abril de 2014

Tú, otra vez tú

Tu pelo siempre olía a tabaco.
Tus labios de nicotina volvieron a mi vida.
La música está demasiado alta.
¿Me estás escuchando?
Me dijeron que habías asfaltado de nuevo tu corazón.
Tal vez ya no podamos tocarnos.
Espero volver a sentir tu presencia.
Tu recuerdo arde haciendo daño.
Convirtiendo todo en cenizas.
Te echo de menos, como siempre.
Mi enfermedad se ha aliado contigo y me estáis matando.
Mis piernas llenas de heridas que nunca curan.
El sudor frío y los espasmos se apoderan de mi cuerpo.
La camisa de fuerza aún no, por favor.
Aún quiero seguir escribiendo el dolor que me provoca tu recuerdo.

domingo, 6 de abril de 2014

Apisonadora de sentimientos

Me dijiste que me traerías un regalo por tu larga ausencia.
Y me quedé solo con lo que me provocaste.
No mentiré y confesaré que en ocasiones he querido perdonarte.
Tirar las tazas de café sobre la mesa y dejar que formen ríos de decepción.
Inundar de nubes la oscura ciudad de Glasgow.
Pero la inspiración y la poesía se acaba como se acabaron mis oportunidades.
Y ahora la vida me quema hasta matar.
He temblado tanto por ti que mis lunares han huido de mi piel.
Y no sé si quiero hablarte de nuevo.
Y que el infierno se desate otra vez.
No he engañado a nadie.
Tal vez me deshaga cuando soples mi cuerpo.
Las estrellas en tu pelo nunca me guiaron a nada bueno.
Fue como volar entre miles de huracanes sin apenas sentimientos.
Pensé que iba a ver el reino de los cielos.
Pero me equivoqué.
Una equivocación cualquiera.
Sin valor pero con mil y un sentimiento.
Esperando al olvido.
La apisonadora de sentimientos no descansa nunca.
Acercarme al espejo y verte entre mi pelo fue lo último en desaparecer.

sábado, 5 de abril de 2014

Creador de daño

Tus labios negros no paran de decir mentiras.
Te vas, te has ido.
Coronas de seda quemadas por secretos que nunca te conté.
Este cuerpo es demasiado joven para alguien tan viejo.
Todos mis hombres de confianza han dejado el reino.
Siempre serás el mismo.
Y el agua no correrá por tus ríos.
El amor tampoco.
Y yo no estaré dentro de ellos.
¿Cuánto duraran tus alas de cera mal fabricadas?
Tengo que admitir que corrí en aquel sueño.
A unos brazos de plástico y medio derretidos.
Sí, esto es por ti.
Lo hiciste peor que mal conmigo.
Ya estoy cansando de decírtelo.
No apareces en mis sueños más grandes.
No quiero ni mencionarte, cariño.
Me dejaste solo y así seguiré estando.
Ya estás mintiéndome de nuevo.
Sí, todo esto es por ti.
Ser solitario.
Incinerador de corazones.
Rompe corazas sentimentales.
Creador de daño sin fin.

viernes, 4 de abril de 2014

Rompe cajas torácicas

Siempre me sentí solo.
Te abrí mis brazos y con ellos mi corazón.
Abracé tu dura espalda casi metálica.
Esto me hace pensar que no eres bueno.
Me has perdido y no tienes mi amor.
El RCP no consiguió salvarnos la vida.
Ahora estoy nadando entre tiburones asentimentales.
Sí, estoy nadando.
Nada más que decir.
Me siento solo entre tiburones asentimentales.
Que camuflan sus lágrimas entre la inmensidad del mar.
Me rompiste la caja torácica y no te sentiste la peor persona del mundo.
Caí en tu opinión y en tu falsa creencia de lo que significabas para mí.
Porque caer no era el problema.
El problema era caer por tu culpa.
Una y otra vez, una y otra vez.
Estaba bailando encima de la mesa de la cocina y me caí del miedo que tenía.
Me rompiste la caja torácica con las manos y no te las cortaste.

jueves, 3 de abril de 2014

Que se los lleve ya la marea

Que suerte que ya no me recuerdes.
Tú aún sigues atrapado en mi hipocampo.
Era de noche y hacía demasiado frío.
Pero aún nos atraíamos y nos repelíamos como imanes.
Despiértame cuando el mundo cambie.
Despiértame cuando tú cambies.
Con luces incandescentes y sonrisas falsas.
Con emociones como montañas rusas a las que nunca subiré.
Perderme nunca me ha sabido tan mal.
No estoy solo aquí.
Aún me queda una pizca de lo que eras.
Pero me queda demasiado del mal que hiciste.
Eso es lo que me dice el corazón.
Hace eones que apagué la razón.
Y cuando suba la marea se llevará mi corona.
Y espero que también mis recuerdos y mis sentimientos.
Pero no me despiertes cuando te vayas, como siempre.
Sabes que no lo soporto.

miércoles, 2 de abril de 2014

Cadáver por ti

Me comen los insectos. 
Se posan en mi mano y me acarician. 
Otros me han comido el ojo. 
¿Por qué no me comen el cerebro? 
Quiero dejar de pensar en ti. 
Y en todo el daño que me has hecho
Mi ropa está llena de polvo y tierra. 
No supiste enterrarme adecuadamente.
Primero la cabeza para negar la culpabilidad. 
Y después el resto del cuerpo como un despojo.
¿Recuerdas? Todo parecía maravilloso aquel día de noviembre.
Ilusiones y alusiones me recorrieron el cuerpo.
Tal vez no haya significado para nadie.
Nada que alivie mi pena salvo morir en tus manos. 
Las implosiones mentales se crean con la punta de las pistolas.
Me has matado de importancia cariño.

martes, 1 de abril de 2014

Actitudes de personas ocres

Nunca me diseccionaron tan bien como aquella tarde.
Estaba desarmado.
Me habían cortado los dedos y las alas.
Ya no podía pasar mis manos por tu espalda.
Miles de manchas borrosas cayendo en picado sobre mi pecho.
Era fatal.
Tu recuerdo y el calor que dejaste.
Tendrías que saber lo que me pasaba.
Malditas actitudes de personas ocres.
Y aún sigue siendo fatal.
No le puedo pedir que haga eso.
No voy a dejar que se ahogue.
Tendrías que saber lo que va a pasar.
Decías que diciembre era fatal.
Pero te equivocabas.
Todos los meses son fatales.
Se acabó el café y con él mis sentimientos.
Ahora no duermo pensándote.
Que pena que no sea mutuo.

lunes, 31 de marzo de 2014

Pesca de arrastre

Me levanto sin apenas animo de la cama.
Han dormido conmigo todos mis demonios.
Me sangra gran parte del cuello y el pecho.
He practicado submarinismo en mis recuerdos.
Quise pescarlos con pesca de arrastre.
Arañando el fondo, destruyendo todo.
Pero son de metal y tienen miles de cajas fuertes.
Lo adornan corales ensangrentados.
Tan duros como mi corazón cuando te ibas.
Cruzar el paso de cebra sin mirar fue el menor de los problemas.
La chimenea quemó mi cuerpo en ritmos armónicos.
No quisiste verlo y te tapaste los ojos con las manos.
Me sentía solo y necesitaba hablar con alguien.
No voy a confiar en ti.
Te has ido con mis sentimientos.
Soy el invierno contra tu primavera.
Tus recuerdos y tu importancia no me superen cada segundo.
Quiero que toda la gente y el ruido desaparezca.
Volverme loco y que me recuerdes.
Que recuerdos que te quise.
Que recuerdes que fuiste importante.
Que recuerdes que me sigues importando.
Que recuerdes que todavía te quiero.

domingo, 30 de marzo de 2014

Cadáver submarino

Las montañas se tiñeron de color azul triste.
Los susurros de las máquinas ahora sin electricidad me atormentan.
Intenté tragar mis miedos como si fueran antidepresivos.
Y no conseguí nada.
Salvo aumentar el tamaño de estos.
El polvo todavía me cubre las pestañas.
Y esta sensación vacía casi me ha comido el poco corazón que me queda.
Añoro escuchar tu voz cuando te recordaba.
Ahora es un eco perdido entre cuevas submarinas.
Un cadáver arrastrado por todos los océanos de la tristeza.
Por muchos años.
Siendo ignorado por todos los depredadores marinos.
Sin traje de funeral y sin amigos.
Solo ese recuerdo naufragado en aquella isla vacía carente de sentimientos.
Ignorada por todo el mundo pero con un gran secreto escondido.
Sin osos polares ni nubes negras.
Te espero en quince minutos.
En la colina donde me siento cada día a observar los colores de los recuerdos.
En la colina del burro apagado
En la del burro azul y triste.

sábado, 29 de marzo de 2014

Hoy volamos a Noruega

Despierta.
Hoy volamos a Noruega.
No te mires al espejo hoy.
Estás precioso tal y como estás.
Deja de tocarte el pelo.
Sabes que te prefiero despeinado.
Llevas mi pañuelo favorito.
Mi quinta posesión más preciada.
Aún me tengo que poner de puntillas para besarte.
En realidad me gusta ser así de pequeño.
Cuando te abrazo puedo sentir más tu espalda con mis manos.
Te tocará ventana.
Y mi mirada de falso odio al sentarte.
Recuerdo cuando te conocí y el ruido lo inundó todo.
De pronto me miras y yo cierro los ojos.
Vienes cargado de tu seguridad y me abrazas.
El tiempo se para y me dices que estarás conmigo.
Has decidido observar a este corazón que late a destiempo.
Me pides que te de un beso y te miro avergonzado.
Tus labios aproximándose a los míos.
Eres un verdadero ladrón.
Despierta.
Hoy volamos a Noruega.

viernes, 28 de marzo de 2014

Que me quieres

Fue la sensación, la enfermedad.
La chispa, la electricidad.
La importancia, el querer.
El cariño, la ida.
Miles de libros quemados en el suelo.
Hablaban de nosotros y los quemé.
Al recordarte la ansiedad me recorre el cuerpo.
Tiemblo y me desmayo en camas sin colchón.
Y las estalactitas se me clavan en el corazón.
No lo entiendo.
Somos más que esto.
Ojalá estuviese contigo hasta el final.
Morí en las borrosas playas de tus sentimientos llanos.
Ojalá hubiese revivido algún día en tu memoria.
De momento no has dicho nada.
No has actuado bien.
Miles de elementos químicos no hacen efecto sin magia.
Y contagiaré a todo el mundo.
Extenderé los brazos y todos me verán.
Un pecho herido.
Unas manchas ensangrentadas.
No más medicaciones.
Es mi decisión.
Aunque me gane el dolor y no pueda dar un paso más.
Estoy marchito tanto por dentro como por fuera.
Desde el corazón.
Hay dolor y una luz muy tenue.
Me dice que no arranque más pétalos a las margaritas.
Que me quieres y que no queme el papel.
No pises los libros que he escrito pensando en ti.
En nuestro recuerdo.
Es nosotros.
Contigo hasta...

jueves, 27 de marzo de 2014

Y tu monocromía

Los huracanes están asolando nuestras almas.
La insatisfacción y las lágrimas por partes iguales.
Se me han caído las uñas de arañar la pared.
Aún no puedo llegar al techo.
Las previsiones son fatales.
Decidiste huir con mi felicidad metida en una caja fuerte.
Y yo me quedé con tu recuerdo metido en una caja de zapatos.
Aún estás a tiempo de saltar en el centro del huracán.
De hacerte pedazos y unirte a mí en esta guerra de vencidos.
Vamos, ven conmigo y no pelees conmigo.
Solo necesito que lo admitas.
Las estrellas caían en tu pecho.
Miles de impacto tiránicos.
No has sido capaz de reunir la fuerza necesaria para olvidar.
Rompiste las almohadas en mi cara.
Miles de plumas a nuestro alrededor.
Caían al suelo sin emoción.
Me recordaron a ti y a tu monocromía.

miércoles, 26 de marzo de 2014

Gigantes agujereados

No puedo fingirlo.
No, no puedo.
Las visiones son cada vez menos esperanzadoras.
Gigantes con agujeros en el corazón.
Inundaciones de sangre cubriendo las montañas.
Empecemos a bailar entre fuegos.
La carta no llegaba.
La espera era insoportable.
Ven hacia mí.
Yo quería ir a esa tienda sueca.
Perdóname por esto.
Pero he vendido toda tu colección de cómics.
Todos tus gorros y todos tus pañuelos.
Tú vendiste mi alma al diablo y no te cuestioné.
Las piedras ya redondas ruedan por las laderas.
Intentan tapar los agujeros de los gigantes sin éxito.
No luches conmigo.
No huyas de mí.
Te espero en el otro lado.
No olvides comprar pan.

martes, 25 de marzo de 2014

El cuello

El niño se ha caído del columpio.
Se ha roto el cuello.
Ojos que no ven corazón que no siente.
Aún tengo arena y sangre en las rodillas.
Se fue como toda alma que toca mi cuerpo.
Seguro que las nubes saben a ti.
En los días más grises me di cuenta.
Cuando descubres que alguien es importante se va sin despedirse.
Me quejaba de los cortes que me provocaste por dentro.
Pero nunca de los que me provocaste por fuera.
Ahora estás más lejos que nunca.
Y fue tan importante para mí.
Para mí y solo para mí.
Al parecer.
La soledad y el aire se enfrentaron a muerte.
Pinté de tu color favorito el cielo.
Haz como si nunca hubiese nacido.
Y seguramente tú harás como si nada hubiese pasado.
Conozco muchas cosas malas de ti.
Y una de ellas es no hacer nada por mi.
Cariño, estoy así por ti.

lunes, 24 de marzo de 2014

¿Cómo es la cara del abandono?

Mañanas arrasadas por olas de desánimo.
Oh, todavía no me has respondido.
Mírame como antes.
El final sin principio.
Mis labios ardían de dolor.
Abrazo la almohada pensando que eres tú.
El arrepentimiento no siempre es en vano.
Corazones morados esperando en la calle.
Helados de fríos bajo una lluvia incesable.
Los recuerdos borrosos y mojados.
Notabas el frío casi sin tocarlos.
¿Cuál es el color del silencio?
¿Cómo es la cara del abandono?
Seguro que se parece a la tuya.
Un atardecer de fuego y otra vez tú en mi cabeza.
Llevo meses paseando vendado.
No pude congelar el tiempo aquél día.
Otra vez es igual.

domingo, 23 de marzo de 2014

Resentimiento

La suciedad cubriendo mi cuerpo.
Siempre buscando el problema.
Intenté pegar con cinta adhesiva mi corazón.
Pero de tanto usarla ya no pega.
Se desangró delante de tus ojos.
Y tú solo miraste para otro lado.
Decidiste no pensar en ello.
No pensar en mí.
Y poner una falsa barrera de felicidad.
Queremos lo que envenena.
¿Pero tú realmente me quieres?
El resentimiento por bandera una vez más.
Dos tibias y un corazón roto en el medio.
En un navío naufragado por tus cañones.
El fondo del mar no es un buen lugar para olvidarte.
Mis dedicatorias van y vienen.
Pero siempre son para la misma persona.
Cada noche ardo junto a mis pensamientos.
Y siempre muero antes de que amanezca.
No sé cómo se llama lo que siento al recordarte.
Es una mezcla de pólvora a punto de explotar y dolor.
Un rastro de hace meses.
Huellas profundas y pistas por todos los lados.
Las pastillas ya no camuflan el resentimiento.
Aún recuerdo cuando mi corazón se partió.
Y tú...

sábado, 22 de marzo de 2014

No es cuestión de confianza

Con mis suspiros creé huracanes de tristeza.
Envuelto en miles de minutos de silencio.
De tu silencio.
No es cuestión de confianza.
O tal vez sí.
Es una perdida de tiempo tras otra.
Te quiero.
Te quiero a ti.
Un ruido constante inundaba mi habitación.
Era mi cabeza pensando en todo lo que había pasado.
Ahora no significará nada para ti.
Un incordio, un picor, una mancha.
No me quedan lágrimas para llorarte.
Y a ti no te queda corazón para comer.
Hoy es una noche oscura y solitaria.
Llena de ruido y agujeros en el pecho.
Te mostré mi verdadera cara.
Te abracé y sentí tu dura espalda.
Eres más que nadie.
Eres más que un recuerdo que ahora parece lejano.
Eres más que unos labios imperfectos.
Pero no eres más que mi decepción.
Y no eres más que todo el silencio entre nosotros.
Traiciones que no te conté.
Promesas que no hicimos.
Botellas rotas sobre mi cabeza.
No volvieron a ser las mismas.
Mi cabeza tampoco.
La discriminación de mi alma.
Y un filo de un cuchillo.
Hiciste tanta mella en mí.
Que rompiste con todo.
Hasta contigo.

viernes, 21 de marzo de 2014

Emociones ¿Compartidas?

Emociones compartidas.
Los flashes te dilataban las pupilas.
Sigues con tu invasión.
Has conquistado mi cerebro con tus recuerdos.
Y ahora pretendes llegar hasta mi pecho.
Eres constante.
Pero solo en mi imaginación.
Me descuidaste y me borraste.
Y seguramente caeré por ti otra vez.
Quiero descubrir el color de tus ojos.
Y el calor de tus brazos.
No pesa y se va.
Me balanceaba sobre los tejados.
Buscándote sin descanso.
Buscando lo que deje atrás.
Mis sentimientos y los recuerdos que van destinados a ti.
Te vas pero yo sigo aquí.
Recuerda ese sábado por la mañana.
Te vas y yo sigo esperándote.
Rompiste la distancia que nos separaba.
Y cortaste el cordón policial que me rodeaba.
Ahora todo parece una broma.
Algo tan lejano pero que yo siento cerca.
¿Cuántos días llevamos sin hablarnos?
Seguramente no estarás pensando en cómo arreglarlo.
No me sorprende la verdad.
Siempre serás así.
Siempre serás descuidado.
Un juguete roto.
Uno más.
Me voy y tú estás ausente.

jueves, 20 de marzo de 2014

Por dentro

Pecados que sufro de verdad.
Necesito esa chispa.
Que te eche de menos otro.
Explosiones de tinta dentro de mi cabeza.
Vete a ignorar a otro.
A maltratar con tu pasotismo a otro.
Reza a la nada.
Porque te vas a convertir en eso.
No pasa nada.
Otra vez.
No lo quiero asumir.
No quiero perderte.
Soy estúpido.
Lo sé.
No entiendo nada.
Y menos a ti.
No puedo aguantarlo más.
La tristeza se siente por dentro.
No por fuera.
Tu fría espalda.
Mis frías manos.

miércoles, 19 de marzo de 2014

No sé

Tu pelo negro nunca sabe nada.
Siempre duda y siempre se preocupa.
Tus mechones caen sobre tus ojos.
Prefieres taparte las manos con tus mangas.
Siempre un libro a la espalda.
No sé.
No sé.
No sé.
Piel muerta sobre tus hombros.
Ojeras hasta el suelo.
El olor de su colonia en tu cara.
No comes.
No bebes.
No sientes.
Cada noche en el tejado.
Contando las estrellas que se apagan.
Ardes junto a las páginas de tu libro.
No sé.
No sé.
No sé.
Te levantas y te subes a la cornisa.
Miras hacia abajo y te mareas.
Voy a saltar.
Lo he decidido.
Arráncamelo de los labios.
No sé.
No sé.
No sé.
Lo que quiero.
Duele en el centro.
Olvidarte entre páginas de libros.
Llorarte en cada párrafo.

martes, 18 de marzo de 2014

Te fuiste, te vas y seguramente te irás

Me dejaste con el corazón en las manos.
Te fuiste cada semana.
Y yo sentí cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo tu ausencia.
No queda nada que nos pueda unir.
Salvo mis ganas de estar contigo.
Compartir un trozo de chocolate y pintar las plumas de las palomas.
El miedo corroe hasta matar.
Siempre te digo lo mismo.
Pero de verdad.
Me aterra más que mi propia muerte.
Chapotear los charcos creados bajo mis ojos con los tuyos.
Este cariño es único en la vida.
Podría ser cruel y decir que no me has sabido querer.
Y que no me mereces.
Ambos sabemos que es verdad y que no lo podemos negar.
Que me descuidaste y yo sigo sufriendo por ti.
Te vas.
Mis ganas de estar contigo se van.
Corazón cerrado y preso del miedo.
No nos queda nada salvo confiar.
No nos queda nada salvo sonarnos los mocos.
Pero te vas.
Cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo.
Y solo me puedes ver una vez en la vida.
Como una estrella fugaz desintegrándose.
El corazón lo hace todo.
Hasta las manchas sangrantes que me has causado en el pecho.
Se van.
Te vas.

lunes, 17 de marzo de 2014

Y esto es lo que pasó

Fuiste descendiendo escalones.
Perdiendo confianza.
Calor, fuego, pasión.
Tu mutismo escaleno acabó con todo.
Tu absentismo generalizado acabó conmigo.
Mis celos incendiarios dieron color a tu cabeza.
Han pasado más de diez días y aún te quiero.
No puedo volver.
Aún sigo sufriendo por ti y todo lo que has hecho y no dicho.
Soy una estrella desintegrada y llena de basura espacial.
Me perdiste y yo me perdí contigo.
No quería que encontraras a alguien mejor que yo.
Pero ya me habrás olvidado.
Una de tus miles de "amistades" fugaces.
Cuando me abrí la cabeza buscándote para matarte.
Solo encontré ganas de seguir a tu lado.
Y las desintegré con mi láser de olvido.
Pero seamos sinceros.
Ese láser está roto.
No sé lo que me pasa cuando te veo.
Pero cada vez tiemblo más.
La idea de ser agua que recorre tu cuerpo.
Tu pelo mojado posándose sobre tu cara.
Quizá comprendas cosas que fueron imposibles.
Cosas que deseé con toda mi alma.
Cosas que temí con todos mis órganos.
Ojalá que en este preciso momento recuerdes lo importante que fui.
Y lo importante que fuiste para mi.

domingo, 16 de marzo de 2014

Acabar

Las cicatrices de mis muñecas solo escuecen cuando su causante las besa.
Fuiste tan importante para mí.
El humo saliendo de mis huesos rotos.
Lanzabas piedras llenas de decepción y temor a mi ventana.
Conseguiste romper los cristales pero no los muros.
Es una prueba más de que existes.
Nunca dijiste lo que sentías.
Comer chocolate no es lo mismo sin tu compañía.
Eres mi inspiración para hacer arte.
Aunque después tenga que recoger los charcos de sangre.
Quiero acabar con todo.
Quiero acabar con los recuerdos, con la importancia, con el dolor, contigo.

sábado, 15 de marzo de 2014

Confiar plenamente

Mareos hiperglucémicos.
Frío en la nuca y un leve cosquilleo en la médula.
No puedo deshacerme de ti.
Apareces hasta en mis sueños.
Todo sucedió en mi subconsciente.
Un amor de cifras centesimales.
Ahora parece un sueño vacío.
Un recuerdo gris emborronado.
Llueven cenizas sobre mi cabeza día tras día.
Ojalá que nuestros caminos se crucen de nuevo.
En una isla desierta.
Donde no tengamos nada.
Donde no nos quede nada.
Salvo confiar plenamente en nosotros.

viernes, 14 de marzo de 2014

Botellas

Clavas la flecha con la carta en la cabeza del mensajero.
Las almas caritativas siempre han sido una de las más débiles.
Me duermo en los tejados.
Será mi plan perfecto para huir.
El frío envuelve mi cuerpo como una coraza.
Y temo por ti ahora.
Cuando las botellas se rompen no vuelven a ser iguales.
Así es la vida, miles de botellas rotas una y otra vez.
Rotas por la misma persona.
Una y otra vez.
Sí, tú.
Me gustaría observarte cuando estés despierto.
Pero jamás despertarás.

jueves, 13 de marzo de 2014

Dos copos

Supongo que te busco en las historias que leo y escribo.
Dándote, de nuevo, la importancia que no mereces tener.
Me gusta pensar que ese eres tú.
Que eso somos nosotros.
Dos copos de nieve microscópicamente perfectos.
Que bailan bajo la lluvia que cae sobre mis ojos.
Recordando una noche más cuanto te quise.
Rompiste el hielo que cubría el lago.
Y nos congelamos dentro de él.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Y entre ellos, el mío

El Sol me está derritiendo la cabeza.
La idea de imaginarme tu cuerpo sudado me está matando.
Hay demasiados corazones sin consuelo.
Y entre ellos, el mío.
Una locura, una detrás de otra.
Cerrar puertas nunca es suficiente.
Te quiero igual que antes o incluso más.
¿Te duele lo que has conseguido?
Soy demasiado bueno para ellos.
Rayos golpeándome en el pecho.
No consiguen reanimar mi corazón.
Siento que te pierdo.
¿Sientes tú que me has perdido?

martes, 11 de marzo de 2014

Raíces secas

Las gotas de agua salpicaban mis botas nuevas.
Nunca había sentido este frío en mi piel.
Tu corazón está más helado de lo que pensaba.
¿Es porque me fui?
Está lloviendo sobre nosotros y ni siquiera lo sabes.
Mi cuerpo y mi pequeño corazón de piedra se están congelando.
Entre tantos aludes interiores.
Mis raíces se están secando y están a punto de arder.
Mientras yo estoy aquí muriéndome por tu culpa.
Tú ya estás olvidándome.

lunes, 10 de marzo de 2014

Lo más

Te di el último trago de agua.
Me sacrifiqué por ti y mi lengua se evaporó.
No encontremos las ruinas de nuestra relación en aquella expedición.
La maldición cubrió todo de arena y polvo.
Recuerdo que no cerraste los ojos al desvanecerme.
Ni buscaste un lugar para que reposara mi recuerdo.
Enredaste mi alma entre miles de arañazos sombríos.
Mis decepciones por un lado y tus silencios por otro.
Soy lo más difícil de entender.
Y lo más fácil de querer.

domingo, 9 de marzo de 2014

Tu pelo agrio

El sudor se apoderaba de ti.
Miles de búhos sin alas mirándote.
¿Te has dado cuenta que siempre te miro a ti?
Aunque no debería.
Mi corazón escuece cuando pienso en tus ojos o en tus labios.
En tu pelo largo y agrio.
La radio está rota y no puedo escuchar lo que dice tu corazón.
Nunca arreglaste el problema.
Solo lo agravaste día tras día.

sábado, 8 de marzo de 2014

Esternón abierto

El agua no fluye aquí.
La gente corre hacia sus casas día tras día.
Supongo que les doy miedo.
Corazón roto año tras año.
Me fui a la cama con la intención de olvidar.
Y las sabanas grises se convirtieron en tormenta.
Esperando un milagro con los ojos abiertos.
Esternón abierto sin plumas.
La bruma del mar cubriéndolo todo.
Aún espero verte otra vez.

viernes, 7 de marzo de 2014

¿Me fallarás otra vez?

Esta liberación no es todo lo que necesito.
Quiero ver el color del infierno.
Y sentir más tormentas en mi interior.
¿Me fallarás otra vez?
Estoy casi seguro de ello.
Sigues matando ángeles que van de capa caída.
La tormenta empezó en el corazón .
Flores en tus clavículas.
Una voz diferente en cada situación.
Y se extendió por todos los órganos como la sangre.
No soy capaz de volar.
Me has roto el ala.
Aunque todo de mí es irrelevante.

jueves, 6 de marzo de 2014

Melocotón amargo

Le canté a nuestra muerte.
El melocotón deja un sabor amargo en los labios.
Estoy enterrado debajo de tu casa esperando al otoño.
Mi alma de poeta aún no ha muerto y araño palabras en la tierra.
Charlando con los gusanos y las polillas me sorprende recordarte.
Me disparaste a quemarropa y no solo una vez.
Risas enlatadas de fondo.
Óxido en tus viejas cañerías.
Con un ojo puedo ver más sentimientos que tú.
Se acaba el tiempo y tú me agarras por el cuello.
Sujétame fuerte y no me sueltes más.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Helicópteros

Entre personas que no sienten ni un mero sentimiento.
Y entre otras que jamás miraron por mí.
Me perdí en un inmenso bosque muerto.
Sonidos de helicópteros.
Quieren matarme.
Espera, aún tengo que expresar mi tristeza.
Ponte el sombrero y mira hacia los molinos.
Lo que sientes no durará mucho.
Tal vez algunas semanas, algunos años.
Mis labios se están secando.
Y mis extremidades se están partiendo.
Otra vez mordiéndote la lengua en sueños.
Cicatrices oníricas
Siempre haciendo algo mal.
Deshacerme en pedazos no fue suficiente para ti.

martes, 4 de marzo de 2014

Las deudas

Las deudas se pagan con la cabeza y con vómitos.
El cenicero roto en el suelo.
La brisa revolviéndote el pelo.
Escapar de la muerte no fue suficiente para ti.
Ahora quieres morir de nuevo.
Sin la calabaza en la cabeza.
Tú lo has mirado.
Tú lo has hecho.
Las deudas se pagan con la cabeza y con vómitos.
Piensa en mí de vez en cuando, cariño.
Nunca fui simpático.
Y no tengo miedo a mostrar mi desagrado.
Tocando mi guitarra y chillando que nunca pagarás.
Romperse las cuerdas vocales por ti aquella tarde fue en vano.

lunes, 3 de marzo de 2014

Dos besos

En el aniversario de nuestra muerte.
Cuando ya no me recuerdes.
Bailaremos bajo la tormenta que un día fueron mis lágrimas.
Un sol que me hizo quemaduras.
No tengo solución.
Te echaré de menos.
Como el viento.
Aún te debo dos besos.
Que pase lo que tenga que pasar.
Protegí lo único bueno que me quedaba de ti.
Y me perdí intentando destruirlo.

domingo, 2 de marzo de 2014

Altas traiciones

De rodillas ante el rey.
Sinsentidos banales y cabezas rodando.
Miradas penetrantes y cabizbajas.
Alabardas apuntando a tu garganta.
Altas traiciones.
Conspiraciones.
Mensajes a otras cortes.
Temor y asfixia por partes iguales.
Juglares riendo y tú sin miedo a la muerte.
La horca o perderme.
Lo que te sea más doloroso.
Seguramente la horca.

sábado, 1 de marzo de 2014

Temblor

Sigo arrastrando mi maleta.
El invierno y el viento frío me han consumido.
Vagando entre calles y bosques nevados.
Sin nada más que mi gabardina y un sombrero.
Me fui como los demás.
Tal vez por miedo, celos y desesperación.
Tal vez por resentimiento, cobardía y viejos fantasmas.
Tiempo para exhalar.
Quería hacerte una confesión más.
Llévame a casa.
Llévame hacia delante.
Así está mucho mejor.
Mucho más que yo.
Corazón coraza de nuevo.
Demasiado tiempo sin una mala noticia.
Demasiado tiempo visible.
Demasiado desprotegido.
Cansando y hambriento.
Asesinato.

viernes, 28 de febrero de 2014

Madera vieja

Los troncos huecos arden con mayor facilidad.
Allí se esconden miles de sentimientos y desgracias.
Liquido inflamable invisible que corroe por dentro.
Tus actos son las cerillas que consumirán mi cuerpo.
Cuando me convierta en cenizas por tu tenue fuego no seré libre.
Desaparecé entre el viento y conmigo mis sentimientos.
Sentimientos que ahora parecen valer poco para tus pobres ojos.
Ya que te ha sido tan fácil cortarme y quemarme.
Abrirme en canal y deshuesarme.
Evaporación.

jueves, 27 de febrero de 2014

Sabanas blancas, abrigos oscuros.

Dedos helados desfilando por tu espalda.
Lo siento pero no puedes hacerlo.
Sabanas blancas, abrigos oscuros.
Los restos de nuestra ropa sobre el armario.
Escamas sobre la almohada en la que dormí.
Y una hoguera creada por mi enfado.
El polvo cubriendo tus delicados huesos.
Directo al cajón de las pastillas.
Etiquetas rojas sobre la mesa.
Dolor en tus brazos llenos de arañazos.
Plumas volando por la habitación.
No puedo dejarte ir.
Traté de ser perfecto.
Y lo conseguí.

miércoles, 26 de febrero de 2014

¿Por qué yo?

¿Por qué me pegaste a tu pared?
Con un material tan cutre como la cinta adhesiva.
Quisiste inmortalizarme.
Pero no pudiste porque ya me habías perdido.
Tu cuerpo alimentado por miedos.
De sonrisas falsas.
De estados de ánimos falsos.
De recuperaciones inventadas.
Hipócrita.
¿Cuál fue el punto mas álgido entre nosotros?
¿Por qué no paras de fingir?
¿Por qué yo?

martes, 25 de febrero de 2014

Se irá como todos

Cerraste los ojos y me acariciaste el pelo.
Te protegí la espalda con mis brazos.
La nieve cayendo alrededor de nuestros inertes cuerpos.
Combustiones espontaneas en el techo.
Susurros, espíritus, ecos.
Auroras boreales pasando entre árboles.
Nuestras almas danzando por ellas.
Ríos arcoíris llenos de paz.
Aún me funciona el tímpano.
La tormenta no tardará en llegar.
Volcará todo su odio sobre nuestros cuerpos.
Y se irá.
Se irá como nosotros.
Se irá como todos.
Se irá como tú.

lunes, 24 de febrero de 2014

Voy a borrar el lunar de mi moflete

El frío rompiendo tus huesos mientras las lágrimas caen por tu mejilla.
Vas a borrar el lunar que tienes en el moflete, guapo.
La ventana llena de vaho gris.
Miles de manos desnudas pidiendo ayuda.
Completamente empapado miras atrás.
Te sangra la nariz.
Se está incendiando el cine de abajo.
Impúlsate de la cama y ve apagando fuegos.
Sabes que no servirá de nada.
Iluminado paredes llenas de sangre.
Un agujero en tu pecho.
Cubos sobre la cabeza.
Escafandras sin oxígeno.
Bombonas a punto de explotar.
Demasiada tranquilidad para este momento.
Pisando cristales y sentimientos.
El fuego ha arrasado miles de corazones hoy.
Velas apagándose delante de mi cara.
Rompiendo ventanas y muros en vano.
No queda vida aquí.
Y no creo que haya nunca.
Ya no.

domingo, 23 de febrero de 2014

Humo

La habitación llena de tu aliento.
La halitosis algún día te va a matar.
Encima de la mesa un paquete de galletas.
En el fondo tus penas y algunos restos.
Días de autodestrucción.
Caídas y recaídas.
Las escamas amontonándose una encima de otra.
Pequeño dragón que no para de escupir fuego.
La operación fue todo un éxito.
No hablemos de mí, por favor.
El ruido al respirar.
El humo que va dejando tu inverosímil boca.
Las baquetas clavadas en tus ojos.
Una perdición, un capricho.

sábado, 22 de febrero de 2014

Corto pero conciso

Mis ganas de ver tu cara se fueron.
O se escondieron tras una fachada de miedo.
No quería que desaparecieras.
O encontraras a alguien mejor.
Porque yo soy el peor de todos.

viernes, 21 de febrero de 2014

Mala persona

Corriente abajo con los salmones.
Tardes púrpura escondidas entre montañas.
Eres mi piedra atada al cuello.
Miradas fijas clavadas a tu espalda.
Jamás vas a admitir que eres una mala persona.
Pero ambos lo sabemos.
Una capa de asfalto sobre mis dedos.
Mi cuerpo hipotérmico buscándote en el fondo.
Evaporación.
Aludes interiores.
Suposiciones exteriores.
Secretos como carámbanos.
Cobardía o mala suerte.
Al revés.
De fin a principio.
Las conspiraciones nunca fueron lo mío.
La anestesia solo duró tres días.

jueves, 20 de febrero de 2014

O morir

Combustión espontánea.
Rompiste tus platos sobre mi cabeza.
Creí que ya no me importabas.
Pero vienes a la carga otra vez.
Con tu bandera de aceptación.
Y tu molesta falsa confianza en ti mismo.
Tu corona hace días que se derritió sobre tu cabeza.
El silencio te delata.
Mis ganas de no hacer nada.
De quedarme en la cama recordando lo que eras.
El cielo nublado.
La tristeza en mis lacrimales.
Ponerse de pie o morir.
Pero no por ti.
O bueno, sí.
Por ti.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Y te miró a la cara

Ardor en el pecho.
Hileras de sangre cayendo.
Has manchadado la camiseta.
Pequeño estúpido.
Levántate y desaparecerá.
Ya tiró tu cuerpo por la ventana.
Y te miró a la cara.
Y le dio igual.
El pavimento ríe al ver tu parietal fracturado.
Una sonrisa en tus labios.
Has perdido.

martes, 18 de febrero de 2014

Es una señal

Corazones al viento.
Suspiros recorriendo la ciudad.
Buscando tu boca.
Pasando por chimeneas.
La nieve cuajándose en tu cabeza.
Actitudes.
Cada bostezo es una señal.
El olor a tristeza y echar de menos.
Deslizándose por el esófago.
Ahí estarás calentito.
Aún quedaba lo mejor de mí.
Pero tu te empeñaste en convertirlo en lo peor.
La cerámica, como los corazones, son frágiles.
Siempre lejos.
Siempre ausente.

lunes, 17 de febrero de 2014

Perenne

Depresión en estado puro.
Enfrascada en dispositivos con pantalla.
Las ramas de los árboles desnudos.
Partiéndose lentamente y cayendo al suelo.
Pisadas por extraños.
Usadas en hogueras para que puedas ver la luz.
Pero tu ceguera precederá a todo.
Incluso a mí.
Un árbol de hoja perenne que nunca significó nada para ti.
Ignorado, marcado, descuidado, quemado.
Mis hojas ardieron una mañana de domingo.
Y ahora solo quedan cenizas a mis pies.
Cenizas mezcladas con savia.
De tus estocadas.

domingo, 16 de febrero de 2014

Pobrecito

Cerrando libros.
Quemando cerillas.
El nudo se está deshaciendo.
Ya no me importa lo que hagas.
O cómo lo hagas.
Querido, mira arriba.
Son miles de palomas libres.
Quiero desempolvar mi cariño.
Para gente que se lo merezca.
Estar hasta la madrugada hablando.
Con gente que se lo merezca.
Gente que de verdad se merezca el titulo.

sábado, 15 de febrero de 2014

Tardes

Coloración pigmea sobre tu tostada.
Molestos sonidos al masticar.
Zumo de enfermedad.
Y cuchillos sin punta.
La sartén ardió hasta los cimientos.
Vómitos en el balcón.
Levántate del trono.
Ya no te pertenece.
Nuestras diferencias nos separaron.
Entierros sin muertos.
Piedras sobre mis sentimientos.
Indiferencia por tu parte.

viernes, 14 de febrero de 2014

Sobrevalorado

Tus labios de nicotina y tu corazón de piedra.
Sobrevalorado trozo de carne.
No sé qué hago.
Aún no te he empujado.
Pero no te prometo nada.
Tus labios de nicotina de nuevo.
Mis partes de tu cuerpo preferidas.
¿Arrastras mi peso ahora?
Saca mi cabeza de esa bolsa.
He cazado algunos miedos.
Puedes comértelos.
Mentiras y más mentiras.
Decepción bajo tierra.
Arrástrate por la arena.
He escondido algunos cristales.
Y soltado algunos escorpiones.
Cosechas lo que siembras.
Y tú nunca has dejado de sembrar.
Escribiendo poemas y perdiéndome.

jueves, 13 de febrero de 2014

Sigues sin merecerme

Largos hombres de nieve.
Derritiéndose ante el apagado Sol.
Su corazón de hielo haciéndose agua.
La pobre bufanda rasgada.
No quiero que llegue mañana.
Porque lo sé.
Sé que te perderé.
Me da miedo mirar hacia atrás.
Y haber perdido el tiempo contigo.
Soy el vencedor y el perdedor al mismo tiempo.
Suspiros huracanados.
Franjas color negro.
Hace tiempo que llegué a una conclusión.
Y la conclusión es que no voy a luchar por mí.
Tú debes luchar por mí.
Tú debes merecerme.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Niño perdido

Niño perdido de Peter Pan.
No encuentro el camino a casa.
Aquí en la oscuridad no hay nadie.
No tengo cuerdas vocales.
No puedo producir ningún sonido.
Esto me está haciendo daño.
Sí, otra vez.
¿Dónde? ¿Dónde estás?
Vidas separadas.
Días monótonos.
Tardes envasadas en ventanas.
En el ojo del huracán.
Rayos, colores fríos y tridentes.
Sin esperanza pero esperanzado.

martes, 11 de febrero de 2014

Anayet

Rodando por la nieve.
Clavándome ramas y recuerdos.
Quiero partirme el cuello con una piedra.
O caer por la gran pendiente.
Tanto blanco me ciega.
Acostumbrado a vivir en la oscuridad.
Enterré mi corazón en el Anayet.
¿Quién soy?
¿Quién fue?
¿Qué fui para ti?
Eterna ingravidez.
Las fuerzas acabándose.
No puedo parar.
Y tampoco quiero.

lunes, 10 de febrero de 2014

Freinak

Seguramente nunca te preguntaste como estuve yo.
Si temblé como siempre.
O lloré como nunca.
Si me hice bola con el nórdico.
O si me puse a escribir un poema lleno de metáforas.
No sé si tengo ego.
Tampoco sé si soy egoísta.
El chico no puede pasar.
Soy tan difícil.
Hierro.
Mitos olvidados.
Bosques arrasados por tu fuego.
Todo lo que escribo por ti.
Y tú no sabes lo que te quiero decir.
Hablo en una lengua muerta.
Búhos camaleónicos volando en círculos.
Mis tatuajes brillando.
Altar, piras funerarias.
Sacrificio.

domingo, 9 de febrero de 2014

Hojarasca

Metáforas hechas con sangre.
Con sangre de mi garganta.
Sigues bajando escalones.
Clavos en vertical sobre mi pecho.
¿Es así como quieres que acabe?
Lleno de odio.
Lleno de celos.
Resentimiento.
Reproches.
Fuego por tus dedos.
Corazón cubierto de hojas secas.
¿Puedes ver el león en mi corazón?
Corona de hierro derretida.
El norte no está aquí.
Ni tampoco está contigo.

sábado, 8 de febrero de 2014

Vuelo 365

Letras mezcladas con química.
Luces azules en el suelo.
Ibuprofeno y soledad.
Horas en una pantalla.
Sufrimiento descafeinado.
Velas adornando mi cuerpo.
¿No ves que me muero extrañándote?
Parafina sobre mi pecho.
Cera ardiendo hasta el corazón.
No hay sonrisa que valga.
Ni un "estoy bien" sincero.
Cera fría escudando mi corazón.
Ahorcarte con la maleta no te sirvió.
Escalones de piedra.
Reactores fallando.
Caída en picado.
Pónganse las mascarillas.
Mis últimos minutos sin ti.
Me tocó ventana.
Al lado de la explosión.
Y me gustó.

viernes, 7 de febrero de 2014

Palo

Volvamos al café de las seis.
Al pan de molde con chocolate.
La manta blanca sobre tus hombros.
La tristeza bajo ella.
Despertarse tarde.
Dolor de cabeza.
Café frío y aguado.
No pertenezco a nadie.
Olor a madera quemada.
Temblor por todo tu cuerpo.
¿Puedes dar un paso?
¿Puedes levantarte?
Abandona otro libro.
Sabes que te hace sufrir.
Tambores a lo lejos.
Quiero alejarte.
No me mereces.
No más "estoy fuera de casa"
No más tú.
Ojalá.

jueves, 6 de febrero de 2014

Aleta caudal

Voces egocéntricas.
Solo has visto la cola de la ballena.
Y ya te preguntas cómo sera el resto.
Dolor de espalda.
Mi sangre sobre tus hombros.
Sigue tensando la cuerda.
Gente, luces, vértigo, ansiedad.
Sentimientos en conserva.
Quedándose en un bote con sal.
Vías del tren desgastadas.
Tablones con miles de cortes.
No puedes pasar.
Accidentes.
Líneas.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Tirita

La pegatina pegada bajo tu suela.
Tu nombre tatuado a decepción en mi piel.
Estás suspendido en el aire.
Con la cabeza hacia abajo.
La sangre se dirige a tu corazón.
Quiero que la rechaces.
Preguntas incómodas.
No me funcionó la estrategia.
Y me cerré.
Detrás de ti.
Plumas sobre tu cabeza.
Convirtiéndose en polvo.
Sabías que podías contar conmigo.
Ya no.
Has vuelto.
Pero no te vas a quedar.

martes, 4 de febrero de 2014

Ácido

Dulce chivato.
Papeles inundados en monóxido de carbono.
Dedos impregnados en tinta.
Fuego en mis venas.
Repelente de emociones.
Romperte por dentro siempre me pareció buena opción.
Acidez estomacal.
Llevo cuatro días sin comer.
Tiemblo como un poseso.
Eres un gusano miserable.
Quiero que te ahorques al revés.
Labios morados.
No más esfuerzo.
Basta.

lunes, 3 de febrero de 2014

Luz del faro

Abrígate hasta la cabeza y no te quedes mirando por la ventana.
Tu viejo amigo hace tiempo que se apagó.
La luz del faro.
Venia cada noche como un vampiro.
Iluminando tu pelo color naranja.
Tanto que parecía que tu cabeza iba a arder de un momento a otro.
¿Has vuelto a visitar al faro?
Sabes que no puedes entrar.
Que hay rocas y olas.
Pequeño fantasma que asola mi fría habitación.
Ilumíname como antes lo hacías.
Apunta a mi pecho.
Ilumina mi corazón.
Y desata este ancla que no para de hundirme.

domingo, 2 de febrero de 2014

O tal vez sí

Eres como el sabor de la naranja mezclada con menta.
Ese gusto a tabaco, ese gusto amargo.
Escapa con el humo toxico de tu cigarrillo.
Crea demonios sin ojos y sin corazón para mí.
Y entierra mis mayores miedos en la arena de la playa.
Asfalto en las rodillas.
Labios rotos impregnados en veneno.
Tus pulmones llenos de hojas secas.
Y tu hioides lleno de balas.
Explosiones llenas de dolor y metafísica.
Ausencias, tiempo perdido.
Mis peores enemigos no son humanos.
O tal vez sí.

sábado, 1 de febrero de 2014

Marcha continuada

Cada día estás más delgado y tienes el pelo más largo.
Sigues esperando.
Sin descanso.
Pero con prisa.
Otra vez te está haciendo lo mismo.
Y el frío te rompe los huesos.
¿Cómo puede dejarte de lado?
Ponte los auriculares, ya pasará.
Sabes que no.
Aunque le des miles de oportunidades.
Siempre fracasará.
Porque tú eres muy difícil.
O tal vez muy fácil.
Solo tiene que abrir las puertas de tu reino del corazón.
Y darte la llave prometida.
Sé frío con él.
Castígale por sus pecados.
Pero que él no sepa cuales son.
Que los descubra por su cuenta.
No te incumbe como.
Solo quieres que esté.
Que esté contigo.

viernes, 31 de enero de 2014

Creo que me importas de verdad

Tus manos rodeando tus rodillas.
Creo que no te importo tanto.
Pinto con carbón mis párpados.
Mis ojos están rojos.
Nieve sobre tus labios.
Siempre ocultando tu estado de animo.
Siempre mintiendo sobre tu felicidad.
Aún no he encontrado la canción necesaria.
Ni el ritmo perfecto.
Para poder describir lo que siento ahora mismo.
Me gustaría que nuestro tiempo se mezclase.
Cenizas sobre tu espalda.
Te esperé toda la noche.
De verdad que tenía ganas de pasar la mañana contigo.
Sé que me estás ocultando algo y me siento mal por ello.
Necesito que confíes en mi como yo confío en ti.
Estoy cansando de ser indirecto.
Despierta.
Y despiértame contigo.

jueves, 30 de enero de 2014

Gabardina

Desconfía de mí.
Debajo de la gabardina llevo miles de pistolas.
No me muevo a voluntad.
Me muevo porque me empuja el viento.
Un viento solitario.
Lloro de impotencia.
Lloro porque m̶e̶ ̶i̶m̶p̶o̶r̶t̶a̶s̶
Lloro porque te quedas con el aire.
He tenido días y días este nudo en la garganta.
Pero aún me sigo preocupando por él.
¿Por qué?
¿Acaso el agua no sabe a agua?
No me recojas cuando caiga.
Porque lo haré por ti.
Y sin saber la razón.

miércoles, 29 de enero de 2014

Agobio

Los botones que adornaban tu chaqueta ahora son mis ojos.
Sálvame.
No, no quiero que me salves.
Sálvame.
Espaldas que lloran.
Gente pisando a otra gente.
Sensación.
Un cielo violeta sobre nosotros.
Mejor dicho, sobre mí.
Tal vez yo no sea suficiente.
O tú no seas suficiente.
Nudo en el corazón.
Sigue el rastro de la pólvora que dejo a cada paso.
Prende fuego.
Explótame.

martes, 28 de enero de 2014

Azrael

Celos tal vez.
Prioridades en las que no estoy yo.
No me quedan ojos para arrancar.
Ni dedos para quebrar.
Sigo sin saber la razón de mis sentimientos.
No puedo dejar de mirarte.
Mírame. 
No soy de agua.
Corriendo en dirección contraria a miles de personas.
Perdonen, déjenme pasar.
Voy a perderte. 
No puedo moverme. 
No me dejan.
Perdonen, mi vida se está acabando.
No puedo alzar el vuelo.
Mis alas han sido cortadas por ti.
De rodillas en medio de estas almas sin cara.
Prometí no usar mis poderes con nadie.
Pero no quiero perderte.
No puedo más.
Estoy temblando, me falta el aire.
Posición fetal entre tantos demonios.
Arrastrándome entre miles de botas.
No puedo ver tu aureola.
Dudo que puedas ver mi luz.
Me han encontrado antes que tú.
Están desgarrándome el corazón.
No puedo sin ti.

lunes, 27 de enero de 2014

No eres el único que está solo.
El ruido de unas teclas siendo pulsadas sin cesar.
Tus lágrimas son gigantes.
Sálvame.
Hazlo por mí.
Saltemos del puente.
Cogidos de la mano.
Aviones despegando.
Garras que nos sujetan.
El viento se nos va a llevar.
Sálvame.
Hazlo por mí.
Hielo derretido.
Moléculas de confianza.

domingo, 26 de enero de 2014

¿Por qué has tardando tanto?

Uno más y paro.
Por mi salud mental.
Oler alcohol no es suficiente.
Cada día necesito más y más.
Y los cordones de mis botas no están lo suficientemente apretados.
No apuntes aún.
Necesito decirte algo más.
Escondí mi agonía entre aquellas botellas.
Y me abrí la cabeza en esa barra.
Rompí la puerta y me llevé la llave.
Ahora sí.
Apunta.
Justo aquí.
En la sien.
Adiós.

sábado, 25 de enero de 2014

Mijail

Levanta de la cama.
Pequeño fantasma.
Que corroe mi alma.
Que muerde mis dedos.
Vamos a hablar.
En el salón.
Sé que eres mudo.
Y que nunca alzas la vista.
Siempre con tu mirada felina.
Escondiéndote detrás de cajas.
Tengo más miedo yo que tú.
Abróchate el cinturón.
Vamos a despegar.

viernes, 24 de enero de 2014

Rojo

No ha vuelto a responderme.
Me ve, me susurra.
Sabe que existo.
Pero no me ha vuelto a responder.
Le miro constantemente.
Pero nada.
Y yo me desespero.
Me desespero como el hombre que planta un olivo y muere esperando a que crezca.
Dulce tentación.
Dulce dolor.
Corre por las parras y pisa la uva.
Córtame el corazón.
Y mezcla mi sangre con el vino.
Alza tu copa.
Y di con valentía que me ignoraste.
Voy a quemar tu pelo.
Y enterrarme en la fuente.

jueves, 23 de enero de 2014

Suspiro

Migas de pan sobre tu camisa.
Inviernos donde sufro de verdad.
Cada lágrima es una pluma perdida.
No eres más que un niño.
Jamás debí cuidarte como te cuidé.
Un aviso, dos avisos.
Échame el aliento.
Acuéstate en el sofá.
Ya recogeré yo tu vomito.
Veamos que caparazón me pongo hoy.
Solo es un poco, no pasa nada.
No duele en el pecho.
Duele en los ojos.
Hablas con tu susurro lento.
Yo hablo gritando.
No te quedes en la calle.
Por favor, te necesito.
Tápate la herida.
La gente pregunta.
Solo el zorro puede hablar.
No pares.
Más.
Más.
Dolor.

miércoles, 22 de enero de 2014

Y tú buscándolo

Yo con el corazón en la boca.
Y tú apuñalandome, buscándolo.
Aún quedan semanas para dudar.
Un rayo de sol me traspasa el cuerpo.
Mis dedos convertidos en ramas se quiebran.
Prefieres que te regale rosas pero solo miras las espinas.
Asfalto, sangre y heridas.
No eres nada más que un error.
Tus dedos sobre la cuerda.
Y la flecha en mi cabeza.
Polvo en mis pestañas.
Arena en mi cabeza.
Pulmones negros.
Labios morados.
Piedras sobre tu cuerpo.

martes, 21 de enero de 2014

Centro

Sopa de estrellas.
Cucharas de madera.
Sueños rotos.
Vaso de agua.
Garganta de piedra.
Tortuga sin caparazón.
Nubes manchadas de sangre.
Escupiendo odio por nuestros colmillos.
Tres mares abriéndose a tu paso.
Sintiendo el calor en tus pies.
Corazón roto que aún bombea sangre.
Algas pegadas a tu boca.
No podrás gritar cuando veas el precipicio.
Unas alas demasiado pequeñas.
Y una voluntad un tanto quebrada.
Caída.
Medicina.
Ataúd.

lunes, 20 de enero de 2014

Nemo

Decadencia.
Son los respiros.
Los susurros.
Los resquicios de algo muerto.
Cristales transparentes.
Que un día fueron tu piel.
Inundaciones en mi alma.
Miles de agujeros sin tapón.
Un día tripulé mis miedos.
Agarrado al timón de mi vida.
Pero el ancla me fracturó el cráneo.
Y mis recuerdos.
Junto a mi alma.
Naufragaron lejos.
Hasta hundirse en el fondo del mar.
Con tu pelo.
Con tus cristales.

domingo, 19 de enero de 2014

Incendio forestal

Incendio forestal.
Que arrasas pasiones.
Sentimientos y  sangre.
Nunca estarás así.
Al menos no por mí.
Nieve sobre la hoguera.
Todo ha pasado muy rápido.
Y mis sentimientos han ido brotando.
Primero te quise y ahora te odio.
Se ha roto algo por dentro.
Las hojas se caen y tú las pisas.
Las olas chocan contra mi cara.
Y mis alas no tienen plumas.

sábado, 18 de enero de 2014

Calle Langham

Hoy he vuelto a la ciudad del olvido.
He descubierto una historia más.
Se ha mudado muy cerca de mi casa.
A la calle Langham.
Cuando vi su cara por primera vez no pude hacer otra cosa que llorar.
Recordé que no me rechazó cuando le conté mis secretos.
Tampoco lo hizo cuando vio mis marcas en el cuerpo.
Yo aún no me he olvidado de él.
Y sinceramente no creo que pueda.
Pero... él sí de mí.
Todo empezó como empiezan y terminan las relaciones.
No me hablas, yo tampoco te hablo, tenemos tanto silencio en común.
Pero él fue mucho más que eso.
Me ignoro día tras día.
Minuto tras minuto.
Segundo tras segundo.
Y yo con el corazón en mi puño y la ansiedad en otro.
Me ha hecho mucho daño y ahora vive al lado de mi casa.
En la calle Langham.

viernes, 17 de enero de 2014

Raisa

Buenos que visten de negro.
Malos que visten de blanco.
Disparos al aire.
Y cuchillos en tus brazos.
Es de noche y estás sola.
Y las lágrimas caen por tu cara.
Escupes fuego invisible.
Y tu piel se vuelve escamosa.
Roba las cenizas de tu familia.
Y escribe un hechizo con ellas.
Espera por lo imposible.
Son cosas que tienes que aguantar.
Respira hondo y acelera.
Quema el bosque.                        

jueves, 16 de enero de 2014

Arleen

Navega por la fría mañana.
Arrastrando tus tormentos.
Toca los árboles.
Siente como empapa tus pulmones.
No necesitas rezar para tener otra vida.
Ya no tienes ese brillo en los ojos.
Hazte cuatro nudos en la bufanda.
Que te apriete la garganta.
Sé que no puedes hablar.
Crea fuertes de cartón.
Esperaré a que llueva para destrozarlos.
Nunca estás en el momento ni en el lugar.
Al final siempre algo falla.
Y esta vez no es por mi culpa.

martes, 14 de enero de 2014

Ya tendrías que saberlo

Descúbreme.
Como un milagro.
Como un regalo.
Como tu presa.
Tendrías que saber lo que va a pasar.
Si sigues así.
Como una serpiente.
Como humo.
Como octubre.
El día que me canse del dolor que me provocas.
Como ilusión.
Como huellas en la playa que las olas borran.
Como un animal en peligro de extinción.
Te odio.
Y te echo de menos.
Como el poeta que sabe que nunca leerás esto.
Como la electricidad que eriza tu pelo.
Como tu experimento de química.
Ya tendrías que saber lo que va a pasar como...

lunes, 13 de enero de 2014

Garganta

Estoy revolviéndome dentro de mi tumba.
Al recordarte.
Al sentir que un día fuiste mio.
Esperando, pudriéndome.
Sé que nunca vendrás.
Y que todo fue una mentira.
Una mentira cubierta de vida.
Ahora te has casado.
Y ya no me hablas cada día.
Delante de mi tumba.
Si pudiera me cortaba la garganta.
Delante de ti, delante de tu familia.
Pero ahora solo tengo arena en la garganta.

domingo, 12 de enero de 2014

Correo para tres

                                                     Dentro de mi corazón.  12 de enero 2014

Querido recuerdo:
Podría preguntarte tu estado de animo pero no me vas a responder.
Mis sueños no son tan buenos como solían ser.
Él no ha vuelto a casa esta noche.
Ni la noche pasada.
Ni la anterior a esta.
Le espero en mi silla de plata.
Me revuelvo el pelo.
Me desespero.
Espero que me muerda en el cuello.
Miro la puerta cada 25 segundos.
Pero no se abre y no me quedan uñas.
Le echo terriblemente de menos.
Y me niego a crecer.
Jamás podré verle si esto pasa.
No hay sonido que ansíe más que su voz.
Él es cruel.
Y me recuerda cada segundo lo insignificante que fui.
Me doy un baño de lagrimas en el recibidor cada noche.
Y me meto en mi cuarto a hacer que no existo.
Quiero fusionarme con la mirilla.
Ella será la primera que te vea.
Teatro, puro teatro.
De indios y vaqueros, de cisnes que más tarde son patos.
Escucho ruidos.
Tal vez sea él.
Aire que pasa por debajo de la puerta.
Es él.
Viene con otro hombre.
                                                 
                                                                              La vida, otra vez.

                                                                                Azrael Scarlet.

sábado, 11 de enero de 2014

Melancolía

Sentimientos que se arrastran.
Sentimientos que no quieren morir.
Al final no fui para ti.
Y los fantasmas vienen a mi cabeza.
Y no puedo matarme.
Y no puedo matarte.
Directo al corazón.
Mi ropa empapada en lagrimas.
Me arrastro.
No puedo mover las piernas.
Te observo.
Eliminación.

viernes, 10 de enero de 2014

Chico valiente

Soy un ch-chico valiente.
Al que le cu-cuesta hablar.
¿Dónde vive el invierno?
¿Cúanto puedes durar?
Tú y el amanecer.
Y estaba bien.
¿Dónde estás?
Esto me está doliendo.
Nunca estás.
Cielo gris y nieve sobre la playa.
Atrévete a volar.
¿Dónde? ¿Dónde?
Nunca estás.

jueves, 9 de enero de 2014

La caída del ángel

Y tú.
Sentado en tu silla de cuero.
Leyendo páginas de citas en el móvil.
Ignorándome como siempre.
Te pregunté si sentías lo mismo.
No respondiste.
Paracaidismo sin paracaídas.
Junto mis brazos a mi cuerpo.
Así iré más rápido.
Caigo desde la estratosfera.
Miles de flechas clavadas en mi espalda.
Formando alas de madera y pluma.
¿Puedo mover las alas?
¿O mi amor no es lo suficientemente fuerte?
¿Siento dolor o temor?
No debo juntar las piernas.
Se prenderán fuego.
Mi corazón ya no late.
Pero aún puedo dirigir mi caída.
Tu pecho.
Tu corazón.

lunes, 6 de enero de 2014

Día de reyes

Quémame los labios y disécame la lengua.
Tritura mis miedos y dámelos de beber.
Arráncame el corazón y estrújalo hasta convertirlo en polvo.
Haz que caiga de rodillas ante ti.
Levántame con un suspiro.
Corta mis alas y tíralas al mar.
Desea lo que yo deseo.
Ama lo que yo amo.
Despierta, estoy en el faro.
Tienes un regalo debajo del árbol.

domingo, 5 de enero de 2014

Ruleta rusa

Juguemos a la ruleta rusa.
No te preocupes.
Las balas las escojo yo.
Ya sabes que no soy como los demás.
Y mis balas son de estaño.
Tristeza.
Pena.
Depresión.
Celos.
Amor.
Soledad.
Enfermedad.
Pereza.
Enfado.
Decepción.
¿Cuál quieres primero dentro de tu cerebro?

sábado, 4 de enero de 2014

Espantapájaros

Me arranco la cabeza.
Y prendo fuego a mi cuerpo de paja.
Mis extremidades hechas con madera son las que arden más lentamente.
Quiero que veas como se quema mi pequeño corazón de esparto.
Mi ropa bordada por la peor e inexperta modista de la corte.
Quiero que me escuches.
Quiero que escuches mis gritos de dolor.
Mi garganta desgarrándose al verte.
Quiero que huelas mi madera quemada hasta las cenizas.
Y la guardes en un sitio vacío.
Por ejemplo, en tu corazón.
Para toda la eternidad.
Pisa y aplasta mi cabeza hasta que sea zumo de calabaza.
No mires abajo.
Te estoy observando.
Y no me gusta lo que veo.
Una persona que creía conocer.
Una persona que más que bien me hizo mal.
Una persona por la cual esperé y se fue con alguien peor que yo.
Los cuervos se posan en mis brazos.
Ya no me temen.
Sigue pisándome la cabeza.
Necesito este placer como el vampiro necesita la sangre.
Quiero que todos los recuerdos que tengo de ti se vayan en forma de zumo.

viernes, 3 de enero de 2014

Bate y fuerza

Siempre te reservaré un sitio en el cielo aunque no te lo merezcas.
Nos columpiamos alto.
Nos columpiamos bajo.
Nos columpiamos recto.
Hasta que caiga dormido.
Dentro de un montón de siglos.
Tú serás mi uña.
Y yo seré tu piel.
No sé si podré recorrer todas las bases.
Y hacer tu querido home run.
He visto muchas bolas malas.
Y muchos out por tu parte.
Aunque si quieres.
Me pondré mi gorra.
Y agarraré mi bate con la mayor fuerza del mundo.

miércoles, 1 de enero de 2014

Dueles

Visitemos la tumba de nuestros sentimientos encontrados.
Dispara esa bala ya. 
Necesito sentirla dentro de mi pecho.
Porque dueles.
Dueles mucho.
Duele tu ausencia.
Duele la soledad que dejas cuando te vas.
Duele ver como prefieres a otros muertos antes que a mí.
Pongamos delfinium sobre la tumba.
Porque yo, como los demás ya estoy muerto.
Pero mi carne no se pudre.
Mis órganos no son comidos por gusanos.
Han muertos mis sentimientos.
Y con ellos tú.